El PCE, primer partido político que apoya la huelga de los Informáticos, llama a derrotar el Tratado de Bolonia


"Ésta es una más de las consecuencias del Tratado de Bolonia, que pone a las Universidades de toda Europa al servicio directo de los intereses del Mercado"

El Partido Comunista de España muestra su apoyo a los Ingenieros en Informática e Ingenieros Técnicos en Informática en sus reivindicaciones ante la exclusión de sus titulaciones en las propuestas de la orden ministerial y del acuerdo de Consejo de Ministros referidas a títulos que habilitan para el ejercicio de las diferentes profesiones de Ingenieros. En el comunicado se suma a todas las exigencias de los Ingenieros Informáticos y los Ingenieros Técnicos en Informática.

Para el PCE, "es incomprensible que la profesión de Ingeniero en Informática e Ingeniero Técnico en Informática se encuentre aún sin regular", lo que da lugar a que todas sus competencias sólo pueden ser reclamadas por la rama de las telecomunicaciones, que sí está regulada.

Los comunistas señalan que de este modo la Ingeniería Informática y la Ingeniería Técnica en Informática se verán equiparadas a los grados formativos, "convirtiendo las titulaciones obtenidas por los profesionales Informáticos en meros adornos en sus paredes y sin ninguna validez".

"Para más de 200.000 profesionales, sus títulos no serán homologables a ningún otro al no existir correspondencia entre los nuevos títulos, y con los años sus títulos irán perdiendo validez y se quedarán en el recuerdo como uno de los mayores engaños del sistema educativo español. Un engaño que aún continúa ya que los estudiantes no están siendo informados, algo que supondría una huida en masa que dejarían vacías a las escuelas de Informática. Sucede también que estos profesionales no podrán trabajar en Europa como Ingenieros, y que las universidades tendrán autonomía parainventar títulos relacionados con la tecnología de forma local y diferente entre ellas, siendo las más beneficiadas las Universidades privadas de manera que cualquiera podría ser informático con independencia de sus estudios", señala el comunicado de la Secretaría del Mundo del Trabajo del PCE.

Para el PCE, "ésta es una más de las consecuencias del Tratado de Bolonia, que pone a las Universidades de toda Europa al servicio directo de los intereses del Mercado, y en las que las empresas financiarán los proyectos de investigación, las cátedras, los becarios, etc. es decir, que se financiará todo aquello que tenga interés para el capitalismo. Y entre estos intereses siempre se ha encontrado el de mantener a muchos titulados, como los Ingenieros en Informática e Ingenieros Técnicos en Informática, sin competencias profesionales, contratados con sueldos miserables y en unas precarias condiciones de trabajo, y que en la inmensa mayoría de los casos se ven obligados a trabajar un gran número de horas extras, que nunca son pagadas".

El PCE muestra "una vez más" su apuesta por lo público y por la enseñanza de calidad, "y por la tripe función de la universidad: docente, investigadora y de difusión del conocimiento y debate sobre las realidades sociales, siempre respondiendo a los intereses y problemas de la Sociedad y de la Justicia y no a los intereses hegemónicos del Mercado".

Ante todo esto, el PCE ha mostrado su apoyo a la huelga convocada para el 19 de noviembre y anima a participar en las movilizaciones que tendrán lugar en las principales ciudades españolas a todos los Ingenieros en Informática e Ingenieros Técnicos en Informática. Anima también al resto de titulados y estudiantes a comprender y apoyar las reivindicaciones de los Informáticos de una agresión de la que ellos pueden ser las próximas víctimas y llama una vez más a todos, estudiantes y titulados, a enfrentar y derrotar el Tratado de Bolonia, que esta trayendo y traerá nefastas consecuencias para nuestro ya mermado sistema educativo, y las tendrá para las condiciones de trabajo de los actuales y futuros profesionales.

Fuente: El PCE, primer partido político que apoya la huelga de los Informáticos, llama a derrotar el Tratado de Bolonia