Hace tres años decidí dar un paso adelante y presentar, junto con otros compañeros, nuestra candidatura para dirigir el Colegio Oficial de Ingenieros en Informática del Principado de Asturias. Para mí ha sido todo un aprendizaje en el que he podido continuar el trabajo de mis predecesores y realizar otras actuaciones con un objetivo principal: “conseguir que nuestra profesión tenga su reconocimiento y sea escuchada en estos momentos que tanto se habla de transformación digital».
Me siento orgullosa de haber vivido la incorporación del Cuerpo de Ingenieros en Informática en la Administración del Principado y las posteriores ofertas de empleo configuradas para dicho cuerpo, el trabajo en la redacción del borrador de las categorías del SESPA y en las alegaciones al Colegio de Telecomunicaciones. Hemos comenzado el cambio de los estatutos para que el Colegio de Ingenieros en Informática del Principado de Asturias sea Colegio de Ingeniería en Informática del Principado de Asturias. También recuerdo el trabajo y apoyo a nuestro candidatura de Ingeniero del año para Carlos Alba, que fue premiada, convirtiéndose así en el primer ingeniero informático en ganar el galardón. Hemos traído a Sergio Boixo y acercado la computación cuántica a nuestra región. Hemos continuado con nuestros eventos anuales en colaboración con el CITIPA: Olimpiadas Informáticas, SITIC y Hora del código. Hemos colaborado en distintos eventos con Escuelas Universitarias y empresas patrocinadoras; semanalmente hemos realizado comunicaciones para dar a conocer los proyectos informáticos de nuestra región y a los ingenieros que hay detrás. Hemos manifestando nuestro malestar ante la frecuencia de proyectos en los que se habla de transformación digital y no hay ningún ingeniero informático… muchas cosas, mucho trabajo, que estoy segura que la Junta y el equipo que dejo podrá continuar.
Cuando comencé en el cargo, recuerdo la negatividad de muchos compañeros, la sensación de que ya no es posible conseguir la regulación ni el reconocimiento. Es verdad que la actual capacidad de crear títulos de expertos sin una base sólida, pero con una potente campaña de marketing detrás está haciendo mucho daño a nuestra profesión, que la fuerza de otras asociaciones ajenas al sector con intereses particulares para recibir fondos de transformación digital añaden confusión, pero por ello, más que nunca, debemos permanecer unidos a pesar de las pequeñas discrepancias, seguir apoyándonos y pensar que otras profesiones han pasado por lo mismo. Estoy segura de que si somos conscientes de la importancia de nuestro objetivo, lo conseguiremos.
Me gustaría despedirme agradeciendo a todos los que han formado parte de mi equipo estos años: Rosa, nuestra secretaria, Pepe, nuestro responsable de comunicación, una Junta que siempre ha estado apoyando, y, sobre todo, los colegiados que dan sentido al trabajo. Me voy con la sensación de dejar cosas pendientes, pero, por otro lado, con la tranquilidad de una Junta que podrá tomar el relevo y seguir haciendo crecer al Colegio.